El 42.2% de los hogares mexicanos se ubican en la clase media, mientras que el 56.6% pertenece a la clase baja y solo el 1.2% alcanza la clasificación de clase alta
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) ha delineado su propia definición de la clase media en México, ofreciendo una visión más ajustada a la realidad del país en comparación con entidades internacionales como el Banco Mundial o la OCDE.
Según el INEGI, para ser considerado parte de la clase media en México, es necesario tener un ingreso mensual mínimo de 22,927 pesos. Esta cifra contrasta con los 77,975 pesos mensuales que caracterizan a la clase alta, y los 11,343 pesos mensuales que definen a la clase baja.
Además, los datos revelan que el 42.2% de los hogares mexicanos se ubican en la clase media, mientras que el 56.6% pertenece a la clase baja y solo el 1.2% alcanza la clasificación de clase alta.
En cuanto al consumo, los hogares de clase media en México muestran un acceso significativo a servicios y bienes del mercado privado, con porcentajes que incluyen el 20.4% de hogares con servicio doméstico, el 31.5% con hijos en escuelas privadas, el 41.7% con tarjetas de crédito, el 55.3% con televisión de paga, el 61.6% con automóviles y el 74% con acceso a internet.
¿Cuántas clases sociales hay en México y cuáles son?
En México, la diversidad económica se refleja en una clasificación detallada de las clases sociales, delineada en el Diario Oficial de la Federación. Este esquema categoriza a la población según sus ingresos y ocupaciones, ofreciendo una visión panorámica de la estructura social del país.
En la base de esta pirámide se encuentra la clase Baja-Baja, que representa alrededor del 35% de la población. Compuesta por trabajadores temporales, inmigrantes, comerciantes informales y desempleados, este sector lucha por subsistir con recursos limitados y depende en gran medida de la asistencia social.
Justo por encima se sitúa la clase Baja-Alta, compuesta en su mayoría por obreros y campesinos cuyos ingresos apenas superan el salario mínimo. Aunque realizan labores físicamente exigentes, su remuneración es apenas suficiente para cubrir necesidades básicas.
La clase Media-Baja, que representa alrededor del 20% de la población, incluye a oficinistas, técnicos, supervisores y artesanos calificados. Aunque sus ingresos son estables, no son especialmente altos.
La clase Media-Alta comprende aproximadamente el 14% de la población y está compuesta principalmente por hombres de negocios y profesionales exitosos, que disfrutan de ingresos económicos sólidos y estables.
Más arriba en la escala se encuentra la clase Alta-Baja, constituida por familias que alguna vez fueron ricas pero cuya fortuna ha disminuido con el tiempo. A pesar de ello, mantienen un nivel económico significativo y estable.
En la cúspide se sitúa la clase Alta-Alta, compuesta por antiguas familias ricas cuya riqueza ancestral es legendaria. Representando aproximadamente el 1% de la población, estas familias disfrutan de una posición privilegiada y de recursos económicos considerablemente amplios.
Artículo tomado de Infobae, lea el original aquí.