“Las compañías líderes han decidido enfocarse en diferenciarse de la competencia y volverse más atractivas, e intencionalmente están centrando sus esfuerzos en reducir la rotación y mejorar el compromiso para evitar la fuga de talento”.
A medida que incrementa el número de empresas extranjeras que llegan a nuestro país, a fin de aprovechar la cercanía con su mercado principal (tendencia conocida como nearshoring), aspectos como la rotación de talento, la cual ha resonado en los últimos meses, así como los riesgos asociados a la pérdida de personal, han comenzado a materializarse.
Por lo anterior, las compañías líderes han decidido enfocarse en diferenciarse de la competencia y volverse más atractivas, e intencionalmente están centrando sus esfuerzos en reducir la rotación y mejorar el compromiso para evitar la fuga de talento.
¿Los procesos de Recursos Humanos son efectivos y eficientes?
Generalmente, suele considerarse que el principal detonador de la rotación de personal en las organizaciones es la compensación económica; sin embargo, no es el único factor, ya que otra de las áreas de oportunidad consiste en el valor agregado que se le ofrece al talento mediante la mejora de los procesos de Recursos Humanos para diferenciar su experiencia en el día a día.
Por ejemplo, se ha identificado que eliminar la fricción o el desgaste innecesario, tanto del personal como del equipo de Recursos Humanos, en los servicios dirigidos a clientes internos permite mejorar significativamente la percepción de cómo están siendo consideradas sus expectativas y el nivel de atención que reciben. Por ende, la implementación de tecnología y automatización ha formado parte de la respuesta; no obstante, es importante comprender que en sí misma esta no resuelve las ineficiencias o errores.
Como en cualquier iniciativa de optimización, es necesario contar con un diagnóstico y el entendimiento común del punto de partida, que les permita a las y los líderes definir y accionar planes mediante una perspectiva integral centrada en la experiencia del personal y su ciclo de vida en la empresa (employee experience y employee jouney), así como analizar la manera en que éstas podrían impactar a los clientes finales.
Al respecto, un error común es buscar la implementación de tecnología sin conocer los requerimientos funcionales de la operación, así como asumir que la automatización en sí misma resolverá los problemas o mejorará la experiencia actual que se brinda al talento.
Por lo anterior, es importante verificar si los procesos actuales están alineados con las prácticas de mercado y si existen desviaciones u omisiones que pongan en riesgo el valor que aportan, así como la oportunidad de respuesta, o, incluso, si estos generan riesgos de incumplimiento regulatorio que además pudieran impactar negativamente al personal.
Artículo tomado de El Economista, lea el original aquí.