Estados Unidos se adelanta a otros países al incorporar sistemas de IA en sus agencias de inteligencia. En una reciente publicación de Bloomberg, se reporta que Microsoft ha trabajado en conjunto con el gobierno estadounidense para desarrollar un modelo de IA generativa al estilo ChatGPT, pero sin conectarse a internet.
De acuerdo con lo compartido, se trata del primer algoritmo de aprendizaje que no habita en la web, sino en un entorno air-gapped. La meta de Estados Unidos es «ganar la carrera para llevar la IA generativa a los datos de inteligencia«, según Sheetal Patel, directora de la CIA. Pero, ¿de qué se trata todo esto?
Los algoritmos de inteligencia artificial generativa se destacan de otros modelos por ser capaces de crear contenido de distintas naturalezas, como imágenes, video, audio o texto. En los últimos años, aplicaciones como ChatGPT o Gemini han ganado relevancia en una gran cantidad de áreas, como herramienta de trabajo o de desarrollo personal.
Ahora bien, ¿a qué se refiere el término de air-gapped? Este tipo de entornos están completamente aislados y no tienen conexión a internet, ni a ningún tipo de red externa a la del sistema. Se trata de una «barrera» para garantizar la máxima seguridad y protección de la información almacenada en el modelo.
De acuerdo con lo mencionado por Bloomberg, este nuevo modelo de lenguaje grande (estilo GPT) es el primero que se entrena y desarrolla fuera de internet. Al estar diseñado para el manejo de los miembros de las agencias de inteligencia de Estados Unidos, se necesitaba un sistema seguro y Microsoft encontró la solución al volverlo un software air-gapped.
Tal como recopila Business Insider, en diciembre del año pasado, la CIA publicó un documento llamado Inteligencia Artificial para el Análisis: el Camino a Seguir. Dentro de este texto de apenas cinco páginas, podemos encontrar el gran interés que tiene una de las agencias de inteligencia más poderosas del mundo en la IA.
Los chatbots de hoy no son inteligentes, pero son innovadores, apasionantes y llenos de potencial en el contexto de los volúmenes y variedades de información que la comunidad de inteligencia recopila, procesa, clasifica y utiliza en apoyo de su misión global. […] Hay buenas razones para estar entusiasmados sobre la IA y sus aplicaciones potenciales en apoyo de la seguridad nacional. Satisfacer una misión de cobertura global a través de múltiples áreas y numerosas disciplinas analíticas y dar sentido a volúmenes de información que superan con creces la capacidad humana.»
Inteligencia Artificial en todos lados
El modelo creado por Microsoft para el gobierno estadounidense asegura ser hermético, y con la capacidad para ser utilizado por unas 10,000 personas. Además de su separación de la red, tiene una cualidad especial y es que no es un algoritmo preparado para aprender de lo que habla con los empleados del gobierno. «No quieres que aprenda sobre las preguntas que estás haciendo y luego revele esa información de alguna manera«, dijo William Chappell, director de tecnología de Microsoft.
No hay organismo, compañía o gobierno que no esté interesado en implementar modelos de esta naturaleza para optimizar su trabajo. Más pronto que tarde, los organismos de vigilancia, espionaje y seguridad nacional comenzarán a desarrollar sus propias herramientas de IA.
La pregunta es, ¿cuál es el límite en la implementación de modelos de IA para la seguridad nacional y otros temas igual de sensibles? Israel ya ha dado muestras de cómo estas herramientas pueden ser utilizadas para la guerra, utilizando la denominada Lavender para identificar supuestos miembros de Hamás y eliminarlos. Se trata de «un sistema de selección de objetivos mediante inteligencia artificial con escasa supervisión humana y una política permisiva con las bajas«, según una publicación en +972.
Artículo tomado de Entrepreneur, lea el original aquí.