Así es como se puede crear una cultura organizacional psicológicamente segura donde tus empleados puedan alcanzar su máximo potencial.
- El liderazgo auténtico y la empatía son esenciales para desarrollar un lugar de trabajo psicológicamente seguro donde los empleados sientan que tienen la capacidad para expresarse.
- Estrategias como la escucha humilde, el reconocimiento del derecho a fallar, la vulnerabilidad y la celebración de los logros, ayudan a combatir la falta de compromiso en el lugar de trabajo.
as empresas tienden a pintar una cultura organizacional perfecta, pero tras bambalinas, la historia es distinta. Según el último informe de Gallup sobre El Estado de la Fuerza Laboral Global, se indica que la «renuncia silenciosa» o «los empleados que no van más allá en el trabajo» sigue prevaleciendo. El informe muestra que el 62% de los empleados a nivel mundial están desconectados.
El abandono silencioso suele ser el resultado de una cultura de trabajo tóxica y/o del agotamiento. Tomar medidas proactivas resulta clave para fomentar un entorno donde los empleados prosperen en todos los niveles de la organización.
En el corazón de esto se encuentra la importancia de la autenticidad y la empatía en el liderazgo, piezas fundamentales para crear un ambiente laboral donde reine la seguridad psicológica.
La autenticidad puede percibirse de manera distinta según quiénes somos y la experiencia que tenemos. A veces es fácil de identificar cuando hay falta de autenticidad. Los signos de la falta de autenticidad se manifiestan cuando el comportamiento de un líder no está alineado en diferentes contextos; así como cuando sus acciones no están alineadas con sus palabras.
Entonces, ¿cómo pueden los líderes crear una cultura laboral psicológicamente segura fundamentada en la autenticidad y la empatía? Estas son cinco maneras poderosas de hacerlo.
1. Fomentar una cultura de expresión y desalentar una cultura de silencio
Una cultura de silencio surge cuando hay una falta de seguridad psicológica. Esto puede ser bastante peligroso, pues conduce a la falta de innovación, una mayor rotación de personal y un rendimiento inferior, por mencionar solo algunos ejemplos. Una cultura de silencio no solo es aquella en la que las personas no pueden expresarse, sino también aquella en la que las personas se niegan a escuchar intencionalmente a los demás.
Fomenta una cultura de expresión alentando la presentación de ideas, haciendo preguntas, reportando errores y desafiando el status quo.
Aquí tienes algunos métodos para hacerlo:
- Usa una combinación de feedback en vivo y feedback anónimo
- Feedback en vivo: Alienta a los empleados a expresar sus opiniones/pensamientos sin sentirse juzgados.
- Feedback anónimo: Crea canales como encuestas de Google que se puedan utilizar para recibir comentarios de los empleados. La retroalimentación anónima puede desalentar el «pensamiento grupal,» cosa que puede resultar ventajosa para producir comentarios más genuinos. El «pensamiento grupal» es cuando un individuo simplemente está de acuerdo con la opinión consensuada en lugar de involucrarse en el pensamiento crítico.
Los líderes que se presentan de manera auténtica y empática son clave para contribuir a una cultura donde se escuche la voz de todos. Esto significa que la integridad es un tema consistente en todos los aspectos de tu vida. Presentarse de manera empática también significa ponerse genuinamente en el lugar de otra persona para entender lo que la motiva y comprender sus sentimientos con compasión y apoyo. Este tipo de líderes son seguros de sí mismos, lo que les permite recibir opiniones que pueden ser desagradables y que los desafían. Los líderes inseguros no aceptan las aportaciones de los miembros del equipo porque pueden percibirlo como un desafío a su autoridad.
2. Escucha y demuestra que te importa
Un líder efectivo es aquel que escucha para entender, en lugar de escuchar para responder. Esto asegura que los miembros del equipo se sientan genuinamente escuchados y comprendidos. También es importante asegurarse de que las conversaciones entre gerentes y miembros del equipo se realicen en proporciones iguales. Cuando los gerentes hablan primero, los miembros del equipo serán menos propensos a ofrecer ideas que entren en conflicto con los líderes. Por eso se recomienda que los líderes hablen al final y den espacio para que cada persona en la sala tenga la misma oportunidad de hablar.
En el libro de Edmondson, destaca la estructura de reuniones laborales de Eileen Fisher que desincentiva las jerarquías y promueve la participación igualitaria, fomentando lo que se llama «un líder en cada silla.»
3. Hacer que sea seguro fallar
Mantenerse innovador en el mundo de hoy requiere permitir a las personas la «libertad de fallar». Esto no quiere decir tomar riesgos no calculados y negligentes que lleven al fracaso empresarial, sino de tomar riesgos calculados.
Aquí tienes algunos ejemplos de cómo los líderes pueden hacer que sea seguro fallar:
- Respuesta enfocada en soluciones: Es importante asegurarse de que el reconocimiento de errores provenga de un lugar de búsqueda de soluciones junto con un elemento de apoyo.
- Talleres de toma de riesgos calculados: Los talleres centrados en cómo tomar riesgos calculados pueden hacer que tomar riesgos parezca menos intimidante y crear una cultura de pensamiento innovador.
En lugar de ver el fracaso como algo que se debe evitar por completo o algo a lo que hay que temer, velo como parte normal del aprendizaje y de la experimentación.
4. Modelar la vulnerabilidad
Es importante ser sincero sobre las áreas en las que careces de experiencia como líder. Durante las reuniones estratégicas, haz todo lo posible por buscar ideas de tu equipo y mantenerte abierto a sus opiniones y direcciones. Esto creará un espacio seguro para futuras reuniones sin temor a ser menospreciado o enfrentar consecuencias.
Muchos líderes se preguntan: «¿Cómo puedo ser vulnerable sin compartir demasiado?»
Es importante señalar que los líderes deben compartir sin hacerlo en exceso. Los líderes deben ser vulnerables con límites adjuntos. La profesora e investigadora en vulnerabilidad, Brene Brown, lo expresa perfectamente: «La vulnerabilidad sin límites no es vulnerabilidad». Por ejemplo, un gerente podría compartir que está teniendo un mal día debido a algunos problemas personales, pero se asegura de no compartir los detalles es esos problemas.
La capacidad de ser vulnerable puede fomentar la creación de un entorno laboral basado en la confianza y la inclusión, lo que resulta en un espacio de trabajo psicológicamente seguro.
5. Reconocer y celebrar a las personas
«La milla extra nunca está saturada,» como dice el famoso dicho. Esto es algo que los líderes deben tener en cuenta cuando se trata de reconocer y apreciar a los miembros de su equipo. Los incentivos económicos sí juegan un papel importante en reconocer adecuadamente a los empleados, pero, cuando vienen de un lugar genuino, el uso de palabras es memorable. Reconocer los logros de inmediato, celebrar en público el trabajo del equipo y enviar una carta de agradecimiento personalizada son algunas excelentes formas de mostrar reconocimiento.
El agradecimiento auténtico lleva a una cultura laboral de seguridad psicológica. Cada individuo tiene sus propias preferencias personales respecto a recibir comentarios positivos. Crear un sistema de recompensas en el que cada empleado tiene la libertad de elegir sus incentivos crea una sensación más personalizada.
Al final del día, cuando los empleados están felices, todo encaja y fluye de manera hermosa y eficiente. Todo empieza por hacer un esfuerzo intencional por encontrar siempre maneras de crear una cultura laboral de la que cada empleado pueda sentirse orgulloso y, por lo tanto, prosperar en todas las áreas, no solo en su carrera.
Artículo tomado de Entrepreneur, lea el original aquí.