La taiwanesa no construirá una fábrica de chips de Nvidia, sino una planta para ensamblarlos, proceso igual de importante, pero que requiere cifras de dinero distintas.
Hace un par de semanas, Foxconn sorprendió a todos con el anuncio de una nueva planta para producir chips GB200 de Nvidia en Jalisco . Este componente es uno de los más avanzados en materia de Inteligencia Artificial; sin embargo, la empresa no dio a conocer cuánto dinero invertirá en el estado para esta nueva sede y estos son algunos detalles que pueden dar un panorama al respecto.
Planta de ensamblaje
La planta que se planea en Jalisco no es una fábrica de chips, es decir ahí no se producirán obleas de semiconductores, ya que implican otro tipo de requerimientos y cifras de dinero mucho mayores.
De acuerdo con el documento Oportunidades para el Nearshoring de Semiconductores en México, elaborado por la Fundación México-Estados Unidos para la Ciencia (Fumec) y la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID, por sus siglas en inglés), la fabricación es la etapa “más difícil y costosa de la cadena de suministro” de chips.
Durante el anuncio que Youn Liu, presidente de Foxconn, dio en la conferencia anual de la empresa, la Hon Hai Tech Day 2024, la planta será “la mayor instalación de producción en el planeta” para los chips más avanzados de Nvidia.
¿Cuánta inversión se requiere?
El ejecutivo únicamente destacó que el componente que se ensamblará en esta planta será el GB200, de Nvidia, el chip más avanzado de la tecnológica capaz de procesar las funciones más innovadoras en el campo de la IA.
Si bien no se tiene una cifra concreta de la inversión total que se desembolsará Foxconn para este proyecto, el documento de la Fumec y la USAID resaltan que una planta de última generación de Ensamblaje, Pruebas y Empaquetado (ATP, por sus siglas en inglés), puede costar entre 300 millones y 1,000 millones de dólares.
Respecto a los requerimientos de instalación, este tipo de sedes necesitan de equipo altamente especializado, como máquinas para el corte de las obleas, montaje de chips, sellado hermético e infraestructura para realizar pruebas.
El talento humano también debe cumplir con estándares educativos, como ser ingenieros en materiales y electrónica, además de contar con posgrados para empaques a la medida o avanzados.
Para la región de Centroamérica, Intel es una de las empresas con experiencia en el sector del ensamblaje de semiconductores. Dentro de su planta en Belén, Costa Rica, se llevan a cabo procesos de ensamblaje y pruebas.
Se estableció hace 27 años, pero tras el inicio de la pandemia y la alta demanda de chips, la empresa decidió integrar la parte del ensamblaje de chips en altos volúmenes, lo cual implicó la construcción de más espacios y tan solo el año pasado, la compañía anunció una inversión de 1,200 millones de dólares para aumentar la producción de este sitio.
Intel decidió apostar por Costa Rica debido a su ubicación geográfica, que le permite enviar semiconductores tanto a América como Europa, algo que Foxconn espera replicar con su planta de Jalisco.
Foxconn-México, una relación de 20 años
La relación entre Foxconn y México inició en 2004, cuando la taiwanesa llegó a Ciudad Juárez, Chihuahua, para instalar una planta que en 2011 alcanzó un récord de exportaciones de 8,600 millones de dólares.
En agosto del 2022, la tecnológica también anunció una inversión de 241.2 millones de dólares para ampliar su capacidad de producción de servidores de IA en el país, cantidad que se sumó a la inyección de 453 millones de pesos para comprar un terreno de 421,600 metros cuadrados en Jalisco.
El año pasado, además, anunció una asociación estratégica con el gobierno de Chihuahua con el objetivo de impulsar la formación de talento, fomentar la tecnología innovadora y promover el desarrollo de energía sostenible.
Artículo tomado de Expansión, lea el original aquí.