Aquellas que superan los 30 años de vida útil para los que fueron diseñadas ofrecen precios de generación más elevados, de acuerdo con un análisis de la ASF.
Una tercera parte de las centrales de la estatal CFE ya rebasaron su tiempo de vida útil, de acuerdo con el último documento de la Auditoría Superior de la Federación (ASF). De las 153 centrales propiedad de la CFE en operación comercial, 59 (equivalentes al 38.6%) ya excedieron el tiempo de funcionamiento para el que fueron diseñadas. La información de la Auditoría toma en cuenta información hasta el 2020.
La edad promedio de las centrales de la estatal es de 42.6 años. Hay algunas como las centrales termoeléctricas de la compañía que ya han rebasado de manera importante el tiempo para el que fueron diseñadas. Tres de estas plantas ya acumulan un uso de 50 años, cuando su periodo de vida útil es de 30 años.
Al exceder el tiempo para el que fueron diseñadas, los componentes de las centrales se degradan y eso provoca una disminución en su eficiencia, un aumento en el uso de combustibles y un incremento en sus fallas y por lo tanto en su disponibilidad. “[La edad de las centrales] impactó en la degradación de componentes y obsolescencia de sistemas, causales principales de fallas y decrementos de unidades generadoras, sobre todo en los procesos de vapor convencional, ciclo combinado y turbogas”, dice el documento publicado el domingo pasado.
Generación IV es la subsidiaria con el mayor número de centrales que ya excedieron su tiempo de uso. De los 25 activos de la compañía que funcionaron durante 2020, 16 ya estaban fuera de su periodo de vida útil, todas termoeléctricas o centrales de turbogas.
La reforma energética de 2013 incluía un plan de retiro de las viejas centrales de la CFE. Las plantas resultantes de las subastas de largo plazo tendrían como finalidad sustituir la energía generada por esos activos, que generalmente funcionan a base de combustibles fósiles. Pero la administración federal pausó esa política y decidió no incluir el retiro de alguna de sus centrales en sus programas.
Una planeación anterior contemplaba el retiro de 115 centrales propiedad de la estatal, entre 2018 y 2023. Es decir, con ello se sacarían de despacho alrededor del 70% de las plantas actuales con las que cuenta la CFE.
Y las filiales de la CFE que suma a las centrales de mayor antigüedad coinciden con las que reportan precios de generación más altos, según el análisis de la ASF.
CFE Generación IV, señalada como la subsidiaria que tiene el mayor número de centrales que han excedido su vida útil, reporta un costo de 1.63 pesos por kilowatt-hora. CFE Generación III agrupa 38 plantas, 16 ya excedieron su ciclo de vida y reportan el segundo costo de producción de electricidad más alto, de 1.49 pesos por kilowatt-hora.
Es importante mencionar que mantener operando unidades que son muy antiguas repercute en los costos de generación de energía, ya que presentan una menor eficiencia térmica y necesitan una mayor asignación de recursos para mantenimientos, lo que repercute en mayores costos variables de operación, de arranque, así como de producción”, dice la Auditoría en el documento.
El costo promedio de producción de electricidad de la CFE es de 1.40 pesos por kilowatt-hora. En perspectiva, las centrales de los productores externos de energía es de 0.76 kilowatt-hora. Estas últimas plantas, cuya administración está concentrada en CFE Generación V, es de 12.8 y son solo centrales eólicas y de ciclo combinado.
La compañía eléctrica nacional se ha mantenido firme respecto a su decisión de que sus centrales sigan operando para no perder participación de mercado en la generación eléctrica. Uno de los puntos principales de la reforma se basa en garantizar el despacho de los activos de la estatal, sin importar el tipo de combustible o su costo de generación.
Nava, Diana. (23 de febrero de 2022). El 39% de las centrales de CFE exceden su tiempo de vida útil. Expansión. Recuperado de: https://expansion.mx/empresas/2022/02/23/asf-centrales-cfe-vida-util-infraestructura-obsoleta.