La firma no puede continuar con sus planes en Sonora hasta que se resuelvan las diferencias con el gobierno de AMLO, para lo que no hay un calendario claro.
Un reciente impulso en el plan del gobierno de cancelar las concesiones de Ganfeng Lithium obligó a la empresa china a posponer indefinidamente su objetivo de comenzar a extraer el metal para baterías en el norte del país, dijo a Reuters un ejecutivo de la compañía.
Las autoridades mineras mexicanas han emitido una notificación a las filiales locales de Ganfeng indicando que nueve de sus concesiones habían sido canceladas. El argumento es que no había cumplido con los requisitos mínimos de inversión, informó la compañía en un reporte de agosto.
“Una vez que el gobierno nos comunicó su intención de emprender estas acciones, el calendario de desarrollo cambió”, declaró el miércoles Peter Secker, responsable del proyecto Sonora Lithium, y añadió que la minera no puede continuar con sus planes hasta que se resuelvan las diferencias, para lo que no hay un calendario claro.
Las obras de construcción de la planta de producción de Ganfeng en Sonora, valoradas en 800 millones de dólares, no han comenzado, lo que ya hacía inalcanzable el objetivo de iniciar la actividad en 2023 incluso sin el desafío gubernamental.
El litio, componente esencial de los vehículos eléctricos, es codiciado por los fabricantes de baterías recargables de todo el mundo. En México, gran parte de las reservas del metal están atrapadas en depósitos de arcilla, lo que dificulta su extracción, y el país no lo produce en la actualidad.
Secker afirmó que la construcción de la planta de producción en Sonora durará 18 meses y detalló que empezará a funcionar justo después, añadiendo que el único factor que ahora frena su inicio es la medida gubernamental.
Las plantas para producir y reciclar baterías formarán parte de un proyecto mayor, que se construirá posteriormente.
Ganfeng Lithium rechaza supuesta falta de inversión
El ejecutivo desmintió la acusación de la autoridad minera sobre la supuesta falta de inversión de la compañía. “Hemos superado el gasto mínimo exigido”, declaró Secker, quien añadió que la empresa utilizará todos los recursos legales disponibles para impugnar la medida y evitar una cancelación.
El gobierno mexicano no respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios sobre la situación de las concesiones. El presidente Andrés Manuel López Obrador, que el año pasado anunció una amplia nacionalización del litio, dijo en septiembre que se estaban revisando las concesiones del país para el metal.
Secker señaló que la única cláusula de la licencia que cuestiona el gobierno es la inversión mínima.
Ganfeng, que adquirió en 2021 Bacanora, el desarrollador inicial del yacimiento, ha realizado pruebas en sus plantas piloto de México y China para asegurarse que su tecnología para extraer el litio funciona a escala comercial, dijo Secker. Ha pasado más de una década desde que Bacanora adquirió por primera vez la concesión.
La empresa nacional mexicana de litio creada el año pasado por López Obrador podría establecer asociaciones con el sector privado siempre que el gobierno tenga la participación mayoritaria, dijo entonces su recién nombrado director, Pablo Taddei.
“Si el gobierno va a invertir, tendrá que haber una valuación”, dijo Secker cuando se le preguntó sobre una posible asociación.
Agregó que la compañía está abierta a ello y dispuesta a abrir la información sobre sus balances, su personal y su tecnología para avanzar en cualquier acuerdo potencial.
“Sería absurdo que el gobierno no trabajara con Ganfeng para desarrollar una estrategia”, añadió el directivo, quien agregó que la firma china también planea producir fertilizantes utilizando el potasio hallado en el mismo yacimiento durante sus trabajos de exploración.
Las reservas de litio en Sonora ascienden a algo menos de nueve millones de toneladas, según datos de la empresa. Aunque el proyecto de Sonora se ha estancado, Ganfeng ha triplicado sus proyectos del metal en Argentina, señaló Secker.
Con información de Reuters.
Artículo tomado de Forbes, lea el original aquí.