Meta trabaja ya en una tecnología menos invasiva basada en una interfaz neural portable.
Elon Musk y Mark Zuckerberg nunca se verán las caras en un cuadrilátero, pero eso no significa que entre ellos no existan tensiones.
Ambos son los líderes de empresas tecnológicas y su rivalidad es natural.
En día recientes Elon Musk habló de los avances hechos por Neuralink, su compañía de implantes cerebrales, y reveló que el primer paciente con un chip de la empresa dentro de su cabeza, ya podía controlar el mouse de una computadora con tan solo pensarlo.
Desde hace Neuralink se ha dedicado a diseñar y desarrollar implantes que puedan interpretar las señales cerebrales para controlar diversos dispositivos, lo que permitiría a personas con discapacidades recuperar funciones sensoriales y motoras perdidas, como la visión, el habla y el tacto.
Y mientras Elon Musk está emocionado por el progreso obtenido, Mark Zuckerberg se muestra cauto.
Durante su participación en un episodio del podcast Morning Daily Brew, el CEO de Meta habló de los implantes cerebrales y de las interfases neurales en las que su compañía ya trabaja y aunque no hizo una mención explícita, la referencia a Neuralink es clara:
«Una de las cosas más salvajes en las que estamos trabajando es esta interfaz neural. No me refiero a un chip en el que conectas tu cerebro. Tal vez en el futuro alguien lo haga, pero yo no querría usar la versión uno de eso… Creo que podría ser mejor esperar hasta que esté bastante maduro. Esperemos a que no tenga que estar actualizando ese aparato cada año.»
La visión de Mark Zuckerberg vs. la visión de Elon Musk
El enfoque de Meta y Mark Zuckerberg es mucho menos invasivo que el de Neuralink. La empresa está desarrollando dispositivos portables dotados con inteligencia artificial que asistan al usuario detectando sus movimientos, permitiéndote, por ejemplo, escribirles a tus amigos.
El ejecutivo explicó: «En el futuro, serás capaz de escribir y controlar algo pensando cómo quieres mover la mano».Por su parte, el procedimiento de Neuralink es injertar un circuito en el cerebro de un paciente para que este pueda controlar algunos dispositivos con su mente. Aunque la tecnología está todavía en una fase inicial, la apuesta de Musk es que algún día será capaz de restaurar la visión, incluso en individuos que nunca la han tenido, y de restablecer funciones corporales básicas en personas con parálisis causada por lesiones en la médula espinal.
Artículo tomado de Entrepreneur, lea el original aquí.