El mango es una de las frutas más esperadas por las personas y la ciencia lo posiciona como uno de los frutos más nutritivos, saludables y deliciosos
Cada año el mango es una de las frutas más esperadas, pero también es temida por la cantidad de azúcares que este porta, sin embargo, la evidencia científica lo posiciona como un fruto nutritivo, saludable y delicioso.
El mango es una excelente fuente de vitamina A, un nutriente esencial para mantener la salud de la piel, además de que ayuda a la producción de colágeno, ayudando a mantener la piel firme y elástica. Sus propiedades antioxidantes nos ayuda retrasando el proceso de envejecimiento de la piel.
Fortalecimiento del sistema inmunológico
Con altos niveles de vitamina C, el mango se convierte en un gran aliado para ayuda a fortalecer nuestro sistema inmunológico, además es crucial para la generación de glóbulos blancos, células cargadas de combatir infecciones y enfermedades.
Beneficia a la salud en los ojos
Incluir mango en la dieta de forma regular puede contribuir a prevenir enfermedades oculares como la degeneración macular y las cataratas. El mango sobresale como una valiosa fuente de vitamina A y luteína, dos nutrientes fundamentales para preservar la salud ocular.
Mejora la digestión
El mango es una fuente rica de fibra dietética, lo que lo convierte en un excelente aliado para mejorar la salud digestiva. La fibra contribuye a prevenir el estreñimiento y favorece la regularidad intestinal al aumentar el volumen, además de que contiene enzimas digestivas naturales que ayudan a descomponer mejor los alimentos.
Reducción del riesgo de enfermedades crónicas
Múltiples estudios han indicado que incluir mango de manera habitual en la dieta puede disminuir el riesgo de padecer enfermedades crónicas como enfermedades cardíacas, diabetes y cáncer. Esto se atribuye a su abundancia en antioxidantes, como los polifenoles y los carotenoides, los cuales combaten el estrés oxidativo y la inflamación en el organismo.
Fortalece el corazón
El mango alberga una gama de nutrientes que favorecen la salud cardíaca, entre ellos antioxidantes, fibra y ácidos grasos omega-3 y omega-6. Estos componentes colaboran en la disminución de los niveles de colesterol LDL, fortaleciendo la salud cardiovascular y mitigando el riesgo de padecer enfermedades cardíacas.
Las personas con diabetes ¿pueden comer mango?
Sí, siempre que el consumo de mango sea con moderación, idealmente en porciones de 80 a 100 gramos, como parte de una comida equilibrada. Es importante para quienes tienen diabetes incluir frutas en su dieta, con al menos tres porciones al día, adaptadas a su plan de alimentación específico.
Artículo tomado de MVS Noticias, lea el original aquí.