Existe una desconexión significativa entre los ejecutivos que impulsan la adopción de IA y los empleados, dos tercios de los cuales no la usan aún.
San Francisco, Cal. La inteligencia artificial (IA) ha llegado al lugar de trabajo para transformar la forma en que los empleados realizan sus tareas. Y aunque en ocasiones se vaticina que la IA reemplazará a los seres humanos en muchos empleos que hoy realizan, para Christina Janzer, vicepresidenta senior de Investigación y Analítica en Slack, solo aquellos que no se adapten a esta nueva realidad corren el riesgo de quedarse atrás.
El impacto de la IA en el entorno empresarial es indiscutible, pero existe una gran desconexión entre la visión de los ejecutivos y la realidad del día a día de los empleados, de acuerdo con la directiva de la empresa de comunicación profesional que Salesforce adquirió en 2021.
Durante Dreamforce 2024, el evento que Salesforce realiza cada año para presentar sus innovaciones, Janzer enfatizó que, aunque los líderes empresariales han comprendido la urgencia de incorporar IA a sus estrategias—con un incremento de siete veces en el último año—, la realidad es que dos de cada tres trabajadores aún no utilizan esta tecnología en sus tareas cotidianas.
Este abismo entre la visión de la alta dirección y la implementación a nivel de los empleados es clave para entender los desafíos que enfrenta la adopción masiva de la IA.
“El entusiasmo y la urgencia por parte de los ejecutivos está en su punto más alto, pero dos tercios de los empleados no usan IA en su trabajo. Hay una gran desconexión”, dijo Janzer en entrevista.
Este desajuste no se debe únicamente a la resistencia al cambio o a la falta de capacitación. Según Janzer, una de las principales barreras es la falta de confianza de los trabajadores en las capacidades de la IA, así como la falta de orientación clara por parte de las empresas para su adopción.
El miedo a ser reemplazados
Uno de los mayores temores entre los empleados es que la IA termine reemplazando sus puestos de trabajo. Sin embargo, lo que está sucediendo en realidad es un cambio en el tipo de tareas que los trabajadores realizan, y la IA juega un papel crucial al asumir las tareas más repetitivas y de bajo valor.
Janzer advirtió que, en lugar de desplazar a los empleados, la IA está liberando tiempo para que puedan enfocarse en trabajos más significativos y creativos.
“Hay tareas que estoy haciendo hoy que en un año la IA hará por mí, lo que me permitirá enfocarme en cosas más creativas y significativas”, dijo.
Este cambio no debe interpretarse como una amenaza, sino como una oportunidad para transformar los roles laborales y mejorar la experiencia del empleado. Para los trabajadores, la clave está en adoptar esta tecnología de manera proactiva. Según Janzer, aquellos que abracen la IA estarán mejor posicionados para tener éxito en sus empleos, mientras que quienes la ignoren podrían quedar rezagados en un mercado laboral cada vez más competitivo.
Experimentar con el uso de IA
La vicepresidenta de Slack aseguró que la adopción de herramientas de inteligencia artificial no es un proceso automático ni perfecto. Es necesario que los empleados experimenten con la IA para comprender mejor sus capacidades y limitaciones.
“Lo que recomendamos es que los trabajadores analicen sus flujos de trabajo y prueben la IA en cada paso”, explicó Janzer.
Este enfoque de experimentación permite a los empleados identificar qué tareas pueden ser mejoradas con la IA y cuáles aún requieren intervención humana. Este proceso es fundamental para generar confianza en la tecnología y para asegurar que la IA se implemente de manera efectiva y eficiente en el lugar de trabajo.
Un ejemplo de este tipo de experimentación que ofrece Janzer es pedir a los empleados que comparen el desempeño humano con el de la IA en sus tareas diarias. Al desglosar su flujo de trabajo en diferentes etapas, los trabajadores pueden probar la IA en cada una de ellas, observar los resultados y decidir en cuáles es más efectiva. De esta manera, se construye una comprensión clara de en qué casos confiar en la IA y cuándo es mejor realizar la tarea manualmente.
Tipos de usuarios de IA
No todos los empleados perciben la IA de la misma manera. Un estudio realizado por Slack y Salesforce, que se enfocó en trabajadores de oficina, identificó distintos tipos de personas en cuanto a su relación con la IA. Entre estos perfiles se incluyen los «maximalistas«, que abrazan completamente la tecnología, los «observadores», que aún están evaluando su potencial, y los «rebeldes», que la ven como una amenaza.
Janzer sugirió que comprender estas diferencias es crucial para impulsar una adopción más amplia de la IA en las empresas.
“Las personas tienen experiencias y necesidades diferentes, y si realmente queremos que la IA funcione, tenemos que encontrarlos donde están”, dijo.
Este enfoque ayuda a que las empresas desarrollen estrategias personalizadas para capacitar a sus empleados y facilitar la transición a un entorno laboral donde la IA desempeña un rol central.
El estudio también destaca que los empleados que utilizan IA regularmente reportan mejoras significativas en su productividad, así como una mejor experiencia laboral. Según el informe de Salesforce, los trabajadores que usan IA afirman tener un mayor equilibrio entre la vida laboral y personal, además de sentir una mayor pasión por su trabajo.
“Los que usan IA están más satisfechos con sus trabajos y tienen una mejor calidad de vida”,dijo Janzer.
Retos y obstáculos
Uno de los puntos más relevantes que aborda Janzer es la velocidad a la que la IA está evolucionando. Lo que antes parecía imposible para la tecnología, ahora es una realidad gracias a los avances rápidos y continuos en el desarrollo de IA.
Esto significa que los trabajadores deben mantenerse actualizados y dispuestos a experimentar con nuevas herramientas que puedan mejorar su rendimiento laboral.
Sin embargo, Janzer comentó que para lograr una adopción exitosa, las empresas también deben proporcionar a sus empleados no solo las herramientas, sino también la formación y los recursos necesarios para que se sientan cómodos utilizando la IA.
“Los empleados no están recibiendo las directrices ni la formación adecuada para aprender a usar la IA, lo que está provocando tasas de adopción más bajas”, dijo.
La falta de políticas claras dentro de las empresas también es un obstáculo. Las organizaciones deben establecer reglas precisas sobre el uso de la IA, especialmente en lo que respecta a la privacidad de los datos y los límites de las tareas que pueden delegarse a la IA. Janzer advirtió que en Slack, por ejemplo, existe una política estricta para proteger los datos de los clientes, lo que establece límites claros sobre cómo y cuándo se puede utilizar la IA.
Artículo tomado de El Economista, lea el original aquí.