El estrés, la actividad física, la dieta y la medicación son factores que condicionan la subida de la presión arterial.
El estrés, la actividad física, la dieta y la medicación son factores que condicionan la presión arterial. Por lo tanto, pueden variar según cada persona. Además, hay otros factores ambientales y estacionales que afectan a la tensión, como puede ser el clima: no es lo mismo hacer senderismo a 30 °c, que estar a 10 °c disfrutando de una taza de chocolate caliente.
«La presión arterial es generalmente más alta en invierno y más baja en verano. Esto se debe a que las bajas temperaturas hacen que los vasos sanguíneos se estrechen temporalmente. De este modo, aumenta la presión arterial porque se necesita más presión para hacer circular la sangre por las venas y arterias que se han estrechado», advierten desde la Clínica Mayo.
La tensión también puede verse afectada por un cambio repentino en los patrones meteorológicos, como un frente o una tormenta. El cuerpo (y los vasos sanguíneos) pueden reaccionar a los cambios abruptos de humedad, presión atmosférica, nubosidad o viento de la misma manera que reacciona al frío: «Estas variaciones en la presión arterial relacionadas con el tiempo son más frecuentes en las personas mayores de 65 años», añaden.
También debemos tener en cuenta que en invierno solemos hacer menos ejercicio —con su correspondiente subida de peso— y, en vacaciones, medimos menos el consumo y la ingesta de sal en los alimentos.
Sin embargo, la actividad física, la dieta saludable y la medicación, son los factores principales y, además, está en nuestra mano controlarlos. Es por eso que conviene tomarse la tensión regularmente, controlar la alimentación y, sobre todo, no hacer ningún cambio de medicación sin hablar antes con el médico.
¿Cuál es la tensión arterial normal?
Cada vez que el corazón late, bombea sangre hacia las arterias. La presión arterial mide la fuerza de la sangre al empujar contra las paredes de las arterias.
«La tensión es más alta cuando el corazón late, bombeando la sangre. Esto se llama presión sistólica. Cuando el corazón está en reposo, entre latidos, la presión arterial baja. Esto se llama presión diastólica. La lectura de la presión arterial usa estos dos números. Por lo general, el número sistólico se coloca antes o por encima de la cifra diastólica. Por ejemplo, 120/80 significa una presión sistólica de 120 y una diastólica de 80″, señalan desde MedlinePlus.
- Normal: menos de 120 y menos de 80.
- Presión arterial alta (sin otros factores de riesgo cardíaco)140 o mayor ó 90 o mayor.
- Presión arterial alta (con otros factores de riesgo cardíaco, según algunos proveedores) 130 o mayor ó 80 o mayor.
- Presión arterial peligrosamente alta: se recomienda atención médica de inmediato con 180 o mayor y 120 o mayor.
A partir de 90-60 mmHg para abajo se considera tensión baja (hipotensión).
¿Cómo se mide la tensión arterial correctamente?
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) hay que llevar a cabo los siguientes pasos para tomar la tensión correctamente. Hay que hacerlo antes del desayuno o de la cena, ya que no es conveniente tomar la presión después de haber comido. También hay que evitar tomar café, té o alcohol y fumar al menos media hora antes de la prueba. Mejor hacerlo en una habitación tranquila, sin ruidos ni interrupciones, con una temperatura de 20-25º C. Hay que intentar estar relajado y prestar atención a los siguientes pasos:
- No hablar.
- Apoyar el brazo a la altura del corazón.
- Colocar el manguito en el brazo sin ropa.
- Usar el tamaño de manguito adecuado.
- Apoyar los pies.
- No cruzar las piernas.
- Tener la vejiga vacía.
- Apoyar la espalda.
¿Por qué tengo que preocuparme por la tensión alta?
Cuando la presión arterial se mantiene mucho tiempo alta, hace que el corazón bombee con más fuerza y trabaje demasiado, lo que puede ocasionar serios problemas de salud, como ataques cardiacos, accidentes cerebrovasculares, insuficiencias cardiacas, e insuficiencias renales.
«Hay que tener cuidado con la tensión alta (hipertensión), ya que supone una mayor resistencia para el corazón, que responde aumentando su masa muscular (hipertrofia ventricular izquierda) para hacer frente a ese sobreesfuerzo. Este incremento de la masa muscular acaba siendo perjudicial porque no viene acompañado de un aumento equivalente del riego sanguíneo y puede producir insuficiencia coronaria y angina de pecho. Además, el músculo cardiaco se vuelve más irritable y se producen más arritmias«, informa la Fundación Española del Corazón.
Desde la fundación nos advierten de que la hipertensión arterial no siempre produce síntomas y puede pasar inadvertida. Es más frecuente a partir de los 40 años, aunque puede aparecer a cualquier edad. Puede tener predisposición familiar, aunque se da también en personas sin antecedentes.
Ante una subida o bajada de tensión, ¿qué hago?
Una subida de tensión puede provocar dolor de cabeza y mareos, así que es importante guardar la calma para evitar desvanecimientos.
Recibir una mala noticia, emocionarse demasiado o realizar un esfuerzo físico muy intenso, así como una comida copiosa, puede ser motivo de una subida de tensión espontánea.
Hay que intentar relajarse, asegurarse de que no se olvidó ningún medicamento rutinario, verificar que el dispositivo para medir la presión arterial funciona correctamente y que esté bien colocado. Si la presión es muy alta hay que acudir al médico.
La Fundación del Corazón nos dan las claves para evitar la hipertensión y advierte: «Los resultados no siempre reflejan una reducción inmediata de la presión arterial, así que es necesario esperar un poco antes de plantearle al médico un cambio de medicación».
- No fumar. El tabaco aumenta la presión arterial y la frecuencia cardiaca. Además, las personas hipertensas fumadoras multiplican el efecto perjudicial del tabaco. Dejar de fumar tiene unos efectos positivos superiores a cualquier medicación para la hipertensión.
- Cuidado con el alcohol. El consumo excesivo de alcohol provoca el incremento de la presión arterial y otras alteraciones perjudiciales el corazón y otros órganos.
- Control del peso. El sobrepeso es una causa de hipertensión. Rebajarlo reduce la presión arterial y disminuye el riesgo cardiovascular y de diabetes.
- Ejercicio. La realización de ejercicio físico regular consigue bajar las cifras de presión arterial. Además, aumenta la masa muscular y la capacidad de esfuerzo, ayuda a controlar el peso y logra disminuir el riesgo cardiovascular.
- Dieta cardiosaludable. Los hipertensos deben disminuir el consumo de sal y alimentos que la contengan. También es necesario consumir frutas, verduras, legumbres, frutos secos, pan y otros cereales. Por último, usar aceite de oliva como grasa principal e incrementar la ingesta de aves y pescado en detrimento de las carnes rojas.
- Tratamiento farmacológico. Si el paciente es hipertenso no puede conformarse con las recomendaciones anteriores, ya que es posible que deba seguir un tratamiento farmacológico.
¿Qué hacer si tengo la tensión baja?
«Si la presión arterial baja, el tratamiento dependerá de la causa —sostiene la Clínica Mayo— si es por un medicamento, el proveedor de atención médica puede recomendar que se cambie o se deje de tomar el medicamento o que se reduzca la dosis. Si no está claro qué es lo que causa la presión arterial baja o no existe ningún tratamiento, el objetivo es aumentar la presión arterial y reducir los síntomas. Según la edad, la salud y el tipo de presión arterial baja, hay varias maneras de lograrlo, aunque primero acude al médico».
- Sal. Los expertos suelen recomendar que se limite la sal (sodio) en la dieta, porque puede elevar la presión arterial, a veces de forma drástica. Sin embargo, en el caso de la presión arterial baja, esto puede ser bueno. No obstante, un exceso de sodio puede provocar insuficiencia cardíaca, sobre todo en los adultos mayores. Por lo tanto, es importante consultar con un médico antes.
- Beber más agua. Los líquidos aumentan el volumen sanguíneo y ayudan a prevenir la deshidratación, lo que es importante para tratar la hipotensión.
- Medicamentos. Hay muchos medicamentos disponibles para tratar la presión arterial baja.
- Incorporarse lentamente después de estar sentado o acostado.
- No beber alcohol.
- Evitar permanecer de pie por mucho tiempo.
Espín, I. (2023, 3 abril). ¿Qué hacer ante una subida o bajada de tensión? Claves y consejos para saber cómo actuar. Salud. https://www.20minutos.es/salud/medicina/subida-tension-alta-presion-arterial-baja-que-hacer-5114520/