A través de esta estrategia, han encontrado una nueva forma de reposicionar sus productos y mantenerse vigentes. Contando su historia, están creando un vínculo con las nuevas generaciones
Para que una marca pueda sobrevivir tiene que entender los constantes cambios del mercado y sobre todo saber cuáles son las necesidades de los consumidores, ya que de no ser así, tienen la posibilidad de quedar rezagados frente a la feroz competencia con marcas rivales que innovan y ofrecen más por el mismo precio, o bien, ver cómo su producto o servicio se va quedando obsoleto.
La tecnología y específicamente el desarrollo que ha tenido el internet y las redes sociales ha cambiado los hábitos y el modo en el que se consumen muchos productos, específicamente la industria del streaming ha revolucionado la forma en la que se consumen las películas, series o documentales.
Tal fue el éxito y la demanda que tuvieron las plataformas de streaming, que tuvieron que empezar a crear su propio contenido, pero producir una película no es económico y no es algo que se pueda hacer tan rápido, por lo que dentro del plan en la expansión de su cartera fue crear documentales o series basadas en marcas o deportes, que al final, son producciones que no requieren de una inversión tan agresiva.
Esta nueva ventana le dio la oportunidad a las marcas de acercarse a sus clientes, reinventarse y sobre todo crear vínculos con las nuevas generaciones, hablando de su razón de ser, sus fracasos y sus casos de éxito, a partir de ello han podido encontrar una nueva forma de reposicionar sus productos y mantenerse vigentes. Te presentamos dos de las marcas que lograron explotar a partir de sus documentales o películas.
Barbie
Es el producto más representativo de Mattel, tiene 64 años en el mercado siendo la muñeca por excelencia en las jugueterías; sin embargo, con el lanzamiento de su película que de estrenará en los próximos días y que es un live action protagonizado por Margot, Robbie y Ryan Gosling, la marca está teniendo un impacto muy grande, principalmente en la venta de la licencia para vender diferentes productos.
Gracias a esta producción se estima que la marca Barbie actualmente cuesta 700 millones de dólares, duplicando su valor en los últimos dos años, además que diferentes marcas han comprado los derechos para comercializar ediciones especiales en productos como zapatos, maquillaje, ropa, e incluso un convenio con Airbnb les permitió lanzar la casa rosa en Malibú California, que es una experiencia inmersiva.
Hay otros ejemplos como el de Mario Bros, que tras su película, Nintendo garantizó que su personaje sea una referencia también para las nuevas generaciones, o la marca Jordan, que con su docuserie basada en la última temporada de Michael Jordan en los Bulls de Chicago, impulsó la popularidad de todos los productos que se comercializan bajo su nombre.
Formula 1
La máxima categoría del automovilismo tuvo una crisis económica entre el 2010 y el 2016, prácticamente era un modelo económico obsoleto, los altos costos de producción en los autos y el viajar por todo el mundo empezaba a ser incosteable para los equipos, además que a nivel mediático no había el impacto necesario para que las marcas decidieran unirse como patrocinadores de alguna escudería.
Todo cambió cuanto Liberty Media compró la Formula 1 por más de 7,000 millones de dólares, la empresa norteamericana se dedicó a crear un plan que diera la posibilidad de llegar a más fans. El golpe maestro, el acuerdo con Netflix para crear Drive to Survive, una serie que narraría los momentos más importantes de la temporada, guionizado y poniendo un toque dramático en cada capítulo.
El resultado fue un rotundo éxito, principalmente porque la gente tuvo la oportunidad de conocer a los pilotos a nivel personal, vieron lo intensa que puede ser una carrera y el morbo de las rivalidades los hicieron interesarse en ver la competencia, aun cuando no entendían del todo de qué se trataba la carrera, esto se tradujo en venta de mercancía, se estima que el 40% de los asistentes en la temporada 2021 fueron aficionados que acudieron por primera vez a una carrera, además que en el último Gran Premio del año en Abu Dhabi, donde se definía el campeonato mundial, tuvo más audiencia que el Super Bowl.
Hoy se estima que la categoría cuesta cerca de los 17,000 millones de dólares.
¿Qué lección dejan?
Es difícil tener una marca con esas dimensiones, pero cuidarla, impulsarla y renovarla es una labor que se tiene que realizar, se tengan muchos o pocos años, sea grande o pequeña. En este sentido, gran parte de la estrategia es acercarse y crear vínculos con los consumidores, y no es necesario crear un documental o una película para eso.
Basta con contar la historia de la empresa a través de un pequeño video al cual se pueda acceder desde un QR que venga en la etiqueta, una tarjeta que explique la razón de ser del producto, incluso un mensaje de agradecimiento por la compra puede hacer la diferencia, de esta forma los consumidores crean un sentido de pertenencia y saben que hay un compromiso con la calidad del artículo que están comprando, así se logra un proceso de recompra y sobre todo, sigue creciendo la marca.
Artículo tomado de El Economista, lea el original aquí.